Título: 50 sombras de Grey.
Autora: E. L. James.
Género:
Romance, erótico, new adult.
Editorial: Debolsillo.
Nº de
páginas: 544 páginas.
Año de
publicación: 2018.
Colección:
1/3.
¡Era
momento de releer esta trilogía! Desde que los leí hace años me encantaron. No
puedo evitar imaginarme a los actores de la película y menos mal que la
adaptación es súper fiel al libro. De lo contrario, no podría leerlo igual.
Ana es
súper tímida (más en el libro que en la película), torpe, despistada, muy joven,
muy inocente y demasiado sincera, se le escapan cosas que no debería. Christian
me parece mucho más bipolar en el libro, es arrogante, controlador y prepotente.
De repente sonríe y de repente está frío. Christian es muy frío, pero sonríe
mucho. La verdad es que ahora me parece un poco psicótico.
Se
nota esa chispa, ese algo, como dice Ana. A primera vista se gustan. A Ana
nunca le ha gustado ningún hombre como para decir que quería una relación, pero
Christian tiene algo que la atrae. Christian siente algo, pero desde su perspectiva
es sexual.
La
inocencia de Ana me hace cierta gracia, ya que cuando leí el libro por primera
vez también era inocente y ahora ha pasado el tiempo y me parece tan lejano.
Kate
siempre me ha gustado, es una muy buena amiga. Una de esas personas que quieres
tener a tu lado. Es divertida y loca, pero sabe cuándo ponerse seria y ayudar a
su amiga.
SPOILER.
Veo a un Christian más simpático, pero veo mucho miedo en Ana. No le gusta que
le pegue, de hecho, le suplica alguna vez y no me ha gustado este aspecto. Ella
es una romántica que se ha enamorado de un sádico, sigue con él porque le
gusta, pero no quiere que le pegue. Cuando le suplica queda claro que no es una
buena relación, le tiene miedo y aunque sea una relación BDSM no es buena.
He visto a
un Christian que se esfuerza por cambiar por ella. Pasa de una actitud de “solo
yo” a “todo por ti” y eso solo significa una cosa, pero él no está dispuesto a
admitirlo.
Me
parece un libro muy intenso por la historia, pero también por el exceso de
detalles. Puede resultar pesado si la historia fuera mala.
Me ha
gustado mucho releer este libro después de tanto tiempo, de haber madurado y lo
he visto de otra manera y lo he disfrutado mucho. Después de ver las películas
unas cuantas veces no me acordaba mucho del libro e iba con la imagen de la
película. En el libro los personajes me parecen diferentes, veo a un Christian
más simpático y permisivo y a una Ana más sensible y más niña.
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